Aprendizaje esperado: Valora el conflicto como oportunidad para que personas, grupos o naciones transformen relaciones negativas o injustas en relaciones que les permitan convivir en una cultura de paz.
Énfasis: Reflexionar sobre la manera en que se presentan los elementos y etapas de un conflicto en relaciones entre personas o grupos sociales.
¿Qué vamos aprender?
Comenzarás por abordar los elementos y etapas de un conflicto en las relaciones entre personas o grupos sociales.
Deberás tener a la mano tu cuaderno o una hoja y un bolígrafo o un lápiz, así como tu libro de Formación Cívica y Ética, ya que realizarás algunas actividades y deberás anotar las ideas principales, preguntas o reflexiones que surjan a partir de lo que analizarás a lo largo de la sesión.
¿Qué hacemos?
A lo largo de tu vida te has encontrado con personas que son diferentes a ti, desde gustos, formas de ser y vestir hasta de relacionarse con las y los demás. Es por esto que no siempre estás de acuerdo con las demás personas, ya que todas y todos son diferentes.
Esta situación estará presente durante toda tu vida, pero esto no debe de ser un obstáculo para poder relacionarte con las y los demás y, sobre todo, tener una convivencia armónica.
¿Qué es un conflicto? Es toda situación que genera disputa o tensión por diferentes intereses, sentimientos y objetivos. Sabes que el conflicto es parte de la conducta humana y de la convivencia, en algunas ocasiones ésta puede provocar tensiones que te haga llegar a la violencia.
Esto no es deseable, pues lastima a las personas y pone en riesgo tu integridad, por ello es importante aprender a solucionarlos de manera pacífica.
Como lo has visto en los temas anteriores, los conflictos están presentes en la vida diaria de las personas.
Piensa en algunos conflictos que has identificado en la familia, escuela, comunidad o el país.
Los conflictos están presentes en todos los espacios donde hay interacción humana, así es que nunca dejarán de existir. Lo mejor será que aprendas a solucionarlos de manera pacífica, respetando los derechos humanos y la dignidad de las personas.
Observa la siguiente imagen.
Responde las siguientes preguntas en tu libreta:
¿Cuál es el problema que plantea la imagen?, ¿cuál es la actitud o postura de las personas involucradas, ¿consideran que la situación es violenta, ¿creen que alguno de los personajes pueda cambiar su actitud?, ¿quién debería de cambiar de actitud?
En la imagen anterior, existe un conflicto porque cada una de las partes pelea por la posesión del objeto. La actitud que toman las personas es de competencia, donde se busca que uno gane y otro pierda, esto te da pauta para ver que los conflictos tienen estructura y elementos que los componen.
A continuación, observa los componentes de un conflicto integrado por 4 segmentos:
1. Las partes: 2 o más individuos que manifiestan necesidades diferentes.
2. El problema: es el núcleo del conflicto.
3. Los intereses de las partes: en ciertas circunstancias no se puede dar gusto a ambas partes.
4. El proceso: es la forma en que se desarrolla el problema y la manera en que las partes afrontan el conflicto y, en ocasiones, buscan una solución.
En alguna ocasión, has vivido una situación en la que has estado en desacuerdo con una persona y esto te ha generado un sentimiento específico, ya sea de tristeza, enojo, culpa, miedo o frustración.
Esto pasa en la casa, con las y los amigos, en la escuela o en la localidad, siempre es posible que alguien quiera algo distinto al resto. Hay conflictos para mantener un empleo, por recursos naturales como la tierra o el agua, por satisfacer derechos o alguna necesidad.
También los hay porque en la amistad o la pareja alguien quiere una cosa distinta a la otra persona, como tener un noviazgo, ir a un lugar o realizar alguna actividad.
En las familias, a veces, algún miembro, como las hijas o los hijos, quieren realizar actividades que los padres no consideran adecuadas. También pasa con las hijas o hijos cuando desean estudiar lejos de casa.
El conflicto puede ocurrir con las personas que interactúan en diferentes espacios: en la escuela, con las y los amigos, vecinos, con las y los compañeros o con las y los maestros, etc. El conflicto involucra a dos o más personas, cada una de las cuales tiene su propia perspectiva.
El problema es un hecho o situación cualquiera que genera incomprensión entre las partes. Por ejemplo, si pretendes entrar a una panadería sin cubrebocas y, si existe un ambiente de comunicación con la persona encargada de la entrada, te pedirá que te lo pongas. En un ambiente de cooperación y diálogo haces caso y te lo pones y, de esta manera, el problema se resuelve.
Pero, si la persona a la entrada de la panadería se comunica contigo de manera agresiva, es probable que la respuesta sea equivalente, y se propicie una confrontación porque tu deseo es entrar y te lo impide de forma grosera. Esta situación puede volverse un conflicto.
En el ejemplo propuesto, analiza la situación que generan los intereses de las partes involucradas permite entender el proceso del conflicto; de esta manera, se puede buscar una solución.
Piensa en cómo te has sentido cuando has tenido algún conflicto, recuerda qué situaciones te han hecho tener estos sentimientos.
Hay veces que te dejas llevar por lo que sientes en esos momentos, lo cual te impide poder pensar de manera objetiva. Por eso lo primero que debes aprender a reconocer los sentimientos que tienes y a la vez identificar qué es lo que los provoca.
Para reflexionar sobre lo que has abordado, recuerda un conflicto que hayas vivido recientemente y escribe en un cuadro, las actitudes y acciones que te hicieron presente e identifica la relación que tuviste con la solución del conflicto.
Como puedes advertir, tus emociones exaltadas te hacen tomar decisiones equivocadas en tu vida. Por eso existe un dicho que sugiere “nunca tomes una decisión cuando estás enojada(o) y no prometas algo cuando estás feliz”, ya que los sentimientos a veces nublan tu claridad y comprensión de las situaciones que se desarrollan a tu alrededor.
Los conflictos son situaciones que se presentan a lo largo de tu vida, todas las personas se han encontrado con ellos.
A veces, los has resuelto de manera satisfactoria y, en otras ocasiones, han sido procesos dolorosos en los que te alejas de las personas por tomar actitudes erróneas o por decir cosas que lastiman. Esto debe evitarse.
Por ello te conviene aprender a solucionarlos, siempre buscando el dialogo como recurso, ya que es mejor conservar una postura abierta y empática hacia los intereses de las partes, cuidando tus derechos e integridad, pero sin pasar por encima de los derechos e integridad de las demás personas.
Reflexiona, a partir de las siguientes preguntas, y realiza una breve actividad:
¿Has tenido un conflicto?, ¿con quién fue?, ¿cómo se desarrolló?, ¿cómo lo solucionaste?, ¿cómo te sentiste ante esa situación?, ¿cómo crees que se sintió la otra persona?
Reserva las respuestas de estas preguntas, posteriormente las necesitarás.
Ahora, revisa los pasos que puedes seguir para solucionar los conflictos.
Si llegara a existir mayor incomodidad o tensión que no ayude a resolver el conflicto, puedes pedir ayuda de una persona mediadora, la cual debe ser imparcial y también puede fungir como árbitro de la situación.
- Experiencia de mediación
Debes buscar la manera de solucionar tus conflictos a través de la mediación. Las soluciones que alcances por la mediación deberán ser justas para ambas partes, de otra manera el conflicto puede resurgir en otro momento; además, ambas partes deben estar de acuerdo.
¿Qué pasa cuando no existe el interés de ambas partes para solucionarlo? En tales casos es importante propiciar la empatía. Si una de las partes carece de voluntad para solucionar el conflicto, dependiendo del motivo y la manera en que se presenta tal resistencia, sería conveniente acudir a una persona que pueda mediar la situación.
La mediación se puede dar por parte de una persona interesada o por alguien en quien las partes reconozcan autoridad. Si el conflicto llega a instancias legales es importante resolverlo por esas vías. En algunos casos, se pueden buscar formas alternas de solución.
Debes evitar que se llegue a las fases de violencia. Hay momentos en los conflictos en que las situaciones parecen insalvables. Se trata de ocasiones en las que cada quien va a proteger su objetivo, esto se puede observar en 4 facetas:
• Competencia: yo gano-tú pierdes.
• Evasión: yo pierdo-tú pierdes.
• Compromiso: yo gano-tú ganas.
• Sumisión o acomodo: yo pierdo-tú ganas. En este caso, la persona deja que la otra parte gane para llegar a la solución del conflicto.
Para profundizar sobre esto último, observa el siguiente video. Toma nota de lo que consideres importante.
- Hacer de los conflictos una oportunidad
Los conflictos son una oportunidad para relacionarte con las y los demás y, a la vez, poder conocer más a fondo a las personas.
Los conflictos permiten solucionar lo que esté a tu alcance, partiendo del diálogo y usando la negociación para llegar a acuerdos.
En muchos momentos de tu vida escolar te has encontrado con situaciones hostiles que te ayudan a tener una convivencia armónica con las y los demás y puedes caer en provocaciones y hostilidades, esto te hace reaccionar de una manera impulsiva y, en muchos momentos, agresiva.
Para prevenir los impulsos violentos puedes alejarte del lugar o tomar distancia de la situación para poder calmarte y cuando estés en tranquilidad puedas solucionar el conflicto de forma objetiva, sin que tus impulsos te ganen.
Escucha y lee la siguiente noticia.
- Hicieron lápices de colores con aroma
Analiza la situación a partir de las siguientes preguntas.
¿Era éste un conflicto? ¿Les tocaba a las y los compañeros intervenir? ¿Por qué? ¿Qué tipo de cambios o transformaciones hicieron estos chicos? ¿Qué consecuencias crees que tuvieron sus decisiones?
Sabes que dentro de la sociedad existen conflictos que surgen a partir de una necesidad social, como en el caso que acabas de revisar, surge una problemática y se busca una solución.
En la actualidad, existen diferentes conflictos de tipo social o personal que debes enfrentar. Algunos ejemplos son los conflictos asociados a la violencia intrafamiliar, la violencia de género y el estrés o ansiedad que se han enfatizado con el confinamiento de varias personas en un mismo espacio físico, ocasionado por la COVID-19.
Por ello, resulta importante aprender a resolver conflictos poniendo en práctica la cultura de paz, asumiendo el diálogo, la empatía y la negociación como criterios para resolver conflictos en casa o en los diversos ámbitos donde te desarrollas.
Aprendiste las fases del conflicto, los pasos para resolverlo y la manera en que las demás personas te pueden ayudar sin necesidad de acudir a la violencia. Reconociste en qué momentos puedes resolver un conflicto, de qué manera y lo que puedes hacer si una de las partes no quisiera resolverlo.
El Reto de Hoy:
Retoma la actividad en la que recordaste un conflicto vivido, reflexiona sobre cómo lo podrías solucionar empleando lo que recién has aprendido.
¿Cambiarías la forma en que lo solucionaron? ¿Cómo lo cambiarías o qué harías diferente? ¿Por qué?
Consulta tu libro de texto de Formación Cívica y Ética para saber más acerca de los conflictos y su solución no violenta.
¡Buen trabajo!
Gracias por tu esfuerzo.