Si a la paz, no a la violencia – Civismo Primero de Secundaria

Aprendizaje esperado: Reconoce la cultura de paz como un conjunto de valores, actitudes, comportamientos y estilos de vida y el rechazo a todo tipo de violencia.

Énfasis: Definir la cultura de paz y el rechazo a la violencia como un estilo de vida.

¿Qué vamos a aprender?

En esta sesión comprenderás qué es la violencia y definirás la cultura de paz. Para ello se describirán situaciones que promueven la cultura de la violencia entre personas, grupos, sociedades y naciones para, en contraposición, definir la cultura de paz.

¿Qué hacemos?

¿Te gustan las historias o relatos?

Para iniciar esta sesión, se te invita a leer y oír los siguientes relatos o historias.

  1. FCYE1_B2_SEM23_PG2_AUDIO 1.

Quisiera irme lejos y poder volar

  1. FCYE1_B2_SEM23_PG2_AUDIO 2.

Yo soy Malcom X

Malcolm Little nació el 19 de mayo de 1925 en Nebraska, en una familia de nueve miembros: los padres y siete hijos. A los seis años se quedó sin padre y a los 12 sin madre.

En 1931, cuando Malcom tenía seis años, encontraron muerto a su padre en las vías de un tranvía y cuando tuvo 12 años su madre perdió el equilibrio mental, por lo que él y sus hermanos fueron entregados a familias protectoras que los trataron como si fuesen ‘objetos de adorno’.

A los 15 años cumplidos, y viviendo en Massachusetts, Malcom Little decidió abandonar la escuela pues quería ser abogado, y una de sus maestras le dijo que fuese ‘realista’ y optase por un oficio como el de carpintero. Así que se trasladó a Boston donde trabajó en estaciones de trenes, restaurantes y limpiando zapatos en las calles.

Dejó Boston para ir a Nueva York, donde se involucró con pandillas propicias a las drogas y los robos. Su mal comportamiento lo llevó 10 años a prisión donde cambió su vida. Entró a la cárcel como delincuente, pero salió de ella como activista o defensor de los derechos de los afroamericanos.

Gracias a su postura carismática, su vocabulario directo y su retórica, Malcom Little se convirtió en Malcom X, uno de los líderes del movimiento del movimiento de los derechos civiles en Estados.

Su fin, como el de otros líderes, ocurrió de manera violenta. X fue el blanco de más de 20 balas de las armas de tres que se le acercaron mientras pronunciaban un discurso en el de baile Audubon en Harlem, el 21 de febrero de 1965.

  1. FCYE1_B2_SEM23_PG2_AUDIO 3.

Daniel y Ernesto eran amigos

Daniel y Ernesto eran grandes amigos. Convivían mucho, pues asistían a la misma escuela, vivían en el mismo barrio y jugaban en el mismo equipo. Pero la amistad terminó y hoy ni siquiera se hablan.

Daniel siempre ha sido una persona posesiva y demandante, quiere tener la razón en todo y que se haga lo que él dice; Ana, quien es una gran amiga de Ernesto, anda con Daniel porque gana popularidad.

Un día, Ernesto estaba contando a Ana que su padre, después de una larga enfermedad, acababa de fallecer. Ésta, solidaria con él, le estaba dando ánimos y para consolarlo lo abrazó y lo besó en la mejilla.

Daniel miró la escena de lejos y, sin preguntar nada, comenzó a golpear y maldecir a Ernesto; le reclamaba de forma airada el abrazar y besar a su novia.

Ernesto no le entendía y tampoco sabía por qué lo agredía, sólo se cubría de los golpes que recibía, sin ton ni son. Ana, pedía a gritos a Daniel que dejara de golpearlo; intentaba, sin éxito, parar a Daniel y repetía que no estaban haciendo nada malo.

La situación llegó a su fin cuando otros de sus compañeros intervinieron. Ana muy enojada le gritó a Daniel y terminó con él y así fue como el noviazgo y la amistad terminaron.

Como viste los relatos anteriores tienen algo en común, ¿te diste cuenta?

Los tres describen situaciones conflictivas que, como tú ya sabes, ocurren en la casa, en la escuela o en la colonia, en la sociedad e incluso en los países de todo el mundo. Muchos de estos conflictos generan violencia provocando que los espacios sean lugares complicados para vivir.

Instituciones internacionales, como la ONU y la OMS, así como los medios de comunicación y las redes sociales, alertan a la población de forma continua acerca de la violencia. Tan sólo hace unos días se leían encabezados como los siguientes:

  • Cada año, más de 1.4 millones de personas pierden la vida debido a la violencia: OMS.
  • Homicidios en el 2021: México registró 73 asesinatos el primer día del año.
  • Violencia imparable: en cinco años se duplicaron los feminicidios en México.
  • Tráfico de armas agudiza conflictos y violencia: México ante Consejo de Seguridad de la ONU.

Los encabezados reportan un alto grado de violencia y eso hace pensar que se vive en un mundo poco esperanzador. ¿No lo crees, así?

En realidad, se puede construir un mundo mejor si se rechaza la violencia y se propicia la paz. Los estrategas de guerra siempre afirman que para vencer al enemigo hay que conocerlo y es por ello que debes esforzarte en entender la violencia y qué la origina para favorecer una cultura de la no violencia.

  • ¿Sabes qué es la violencia?
  • ¿Por qué es tan nociva?
  • ¿Cómo se reproduce en las sociedades?
  • ¿Por qué se supone que la no violencia puede ser el origen de un mundo mejor?

Se irá dando respuesta poco a poco, para ello se iniciará por comprender qué es y cómo se concibe la violencia.

Como recordarás, en las relaciones interpersonales siempre hay formas y modos para abordar las situaciones; por ejemplo, en la escuela y la convivencia diaria siempre tienes la opción de decidir, de aceptar las condiciones de otras personas, de fijar una postura, así como de ser asertiva o asertivo, o no, en la forma de actuar y conducirte.

Conócete un poco más, reflexiona sobre cómo reaccionarías ante una situación que puede provocar violencia. Por ejemplo, del siguiente listado de conceptos elige uno de cada par.

  • Diálogo o conflicto.
  • Gritar o hablar.
  • Imponer o consensuar.
  • Expresar o callar.

Bien después de que ya has elegido tus conceptos, se espera que hayas elegido en el primer caso dialogar, en donde puedes expresar como te sientes con ecuanimidad, hablar sin gritos, ni de forma escandalosa, y que te guste consensuar y llegar a acuerdos o pactos porque así convives mejor con las y los demás.

Entonces, piensa que si son muchas las personas que piensan igual que tú y actúan como se expresó en el párrafo anterior y actúan de manera pacífica, ¿Por qué se genera la violencia?

De forma común, cualquier persona asocia la violencia con golpes, insultos y amenazas; en fin, con el uso visible de la fuerza, y es correcta esa asociación, pero la violencia es más que sólo golpes y amenazas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) concibe como violencia al uso deliberado de la fuerza física o el poder, ya sea en grado de amenaza o efectivo, contra uno mismo, otra persona o un grupo o comunidad que cause o tenga muchas probabilidades de provocar lesiones, muerte, daños psicológicos, trastornos del desarrollo o privaciones.

¿Entonces, si tú vez en la calle a dos personas agrediéndose, física y verbalmente, por cederse el paso con el automóvil, estas presenciando un acto violento?

En efecto, ya que las personas están intentando dañarse, de manera visible, al grado de lesionar su integridad física. Este ejemplo deja claro que la violencia está relacionada con el uso deliberado de la fuerza, pero también puede estarlo con el poder.

¿Recuerdas a Malala Yousafzai?

La adolescente paquistaní que ganó el Premio Nobel de la Paz en 2014. Pues su situación es también un ejemplo de violencia por fuerza y poder. Malala fue atacada por el gobierno de los talibanes, el grupo en el poder, por levantar la voz para defender el derecho a la educación de las niñas, y la agresión que recibió estuvo a punto de costarle la vida.

Pero estos no son los únicos ejemplos de violencia por la fuerza y el poder, hay muchos más; por ahora se continuará con la búsqueda de más elementos para comprender mejor las manifestaciones de la violencia.

Ahora, observa en el siguiente video, la definición del sociólogo noruego Johan Galtung, un gran estudioso de la paz. Anota las palabras clave de lo que es para él la violencia.

  1. Las violencias en la convivencia cotidiana.

Revisa del tiempo 0:39 al 1:12.

Como se expone en el video, la violencia puede ser vista también como la privación de los derechos humanos fundamentales y como la resultante de la insatisfacción de cinco necesidades básicas: la supervivencia, el bienestar, la identidad, la libertad y el equilibrio ecológico.

La violencia, según afirma este sociólogo, puede llegar a provocar la degradación humana. Su fundamento está en los daños que se pueden infligir a un ser humano cuando es víctima de actos violentos.

Galtung también confirma la amplitud de este fenómeno que no sólo es producto de los golpes. Vuelve a revisar el video para ver a qué se refiere. Se recomienda, nuevamente, que anotes los conceptos que amplíen tu conocimiento acerca de la violencia.

  1. Las violencias en la convivencia cotidiana.

Revisa del tiempo 1:17 al 2:37

Como pudiste ver algunos conceptos clave que se vieron en el video son: violencia directa, violencia estructural y violencia cultural o simbólica.

Así es, en sus estudios, Galtung explicó la existencia de tres formas de violencia: directa, estructural y cultural o simbólica y las representó en un triángulo, como el que se presenta a continuación, para explicar su relación.

La violencia directa es visible porque se conoce al agresor y se concreta con comportamientos y actos agresivos como los insultos y golpes; por ello, explica que es física, verbal o psicológica. Los relatos de Andrés y Ernesto son un claro ejemplo de este tipo de violencia, aunque en los otros relatos también está presente.

La violencia estructural es indirecta, pues no tiene un agresor identificado; se centra en el conjunto de estructuras que no permiten la satisfacción de las cinco necesidades básicas (supervivencia, bienestar, identidad, libertad y equilibrio ecológico); tiene su origen en las condiciones sociales derivadas de los conflictos o situaciones injustas. Tal es el caso de la migrante que se convierte en víctima, no sólo de violencia directa, sino estructural, al no tener la posibilidad de sobrevivir y desarrollarse en su lugar de origen.

La violencia cultural o simbólica se genera en un marco legítimo porque se acepta y concreta en las actitudes de las personas. Forma parte de las costumbres y tradiciones aprendidas a lo largo de la vida; algunas causas de violencia cultural pueden ser la discriminación, la intolerancia o el abuso del poder. Malcom X fue producto de la discriminación racial en Estados Unidos y, por lo tanto, de la violencia cultural.

Los comportamientos y situaciones de violencia estructural y cultural pueden dar lugar a la violencia directa, tal y como lo representan las flechas en el triángulo.

Otros ejemplos de violencia pueden ser todas las guerras civiles y mundiales que se vivieron en el siglo pasado, éstas son ejemplos de violencia estructural que se convierte en directa. Sin embargo, hay que aclarar que la violencia se puede transformar de manera positiva. Continua la revisión del siguiente video, para comprender en qué se pude convertir.

  1. Las violencias en la convivencia cotidiana.

Revisa del tiempo 2:38 al 4:05.

La información que aporta el video te puede hacer reflexionar que la violencia puede anteceder a la paz, aunque suene raro.

Aunque la violencia ha estado y está presente en la vida de los seres humanos, estos siempre han luchado por erradicarla y buscar formas para que ya no suceda; para que nadie esté por encima de los derechos humanos o ejerza violencia contra otras personas ni contra sí.

¿Cómo supones que se podría rechazar la violencia? ¿En qué propuestas pensarías tú?

El rechazo a la violencia implica promover una cultura de paz. Aspirar a tener un mundo donde todas y todos puedan ser libres y disfrutar de la vida en un ambiente de armonía y respeto hacia las y los demás.

Pero, ¿en qué consiste la cultura de paz?

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, la paz no es sólo la ausencia de guerra sino, sobre todo, un conjunto de valores como el respeto a la vida, la libertad, la democracia, la educación, la tolerancia, la cooperación, la igualdad entre hombres y mujeres o el respeto al medio ambiente. Lograr una cultura de paz supone que las personas lleven a cabo acciones acordes con estos valores.

La cultura de paz supone la necesaria participación de todas y todos: en la familia, en política, en docencia, el periodismo, la medicina y muchos otros ámbitos profesionales más. Para lograr la paz, todas y todos tendrían que rechazar los comportamientos violentos, prevenir los conflictos y solucionar los problemas mediante el diálogo, así como tomar como punto de partida y fin de las relaciones inter e intrapersonales el respeto a los derechos humanos.

¿Qué otros elementos podrían llevarte a construir una cultura de paz?

Además de los valores y las actitudes que ya se comentaron, habría que agregar:

  • Empatía.
  • Diálogo.
  • Comunicación asertiva.
  • Escucha activa.

En todo proceso hacia una cultura de paz es importante buscar de dónde vienen los conflictos y cómo se actúa ante ellos. Todas y todos deben estar conscientes de que sus actos tienen consecuencias y que, en ocasiones se actúa sin pensar que las decisiones pueden afectar a otras personas.

Ahora, se te invita a reflexionar de nuevo en ello. A continuación, se realizarán una serie de preguntas para que elijas una opción. A la par se irán respondiendo, para que realices una comparación con tus respuestas.

  1. Cuando te enojas:
  • Grito.
  • Pienso antes de actuar.
  • No hago nada.

Respuesta:

Pienso antes de actuar.

  1. Cuando tienes un conflicto con tus padres, ¿qué haces?
  • Trato de hablar con ellos.
  • Me olvido del problema.
  • Busco una solución en mi beneficio.

Respuesta:

Trato de hablar con ellos.

  1. ¿De qué manera solucionas tus problemas?
  • Hablando.
  • Gritando.
  • Peleando.

Respuesta:

Hablando.

Como habrás reflexionado, para solucionar un conflicto es primordial guiar tu comportamiento con base en valores, como la tolerancia y el respeto, dialogar y ser asertiva o asertivo en las decisiones.

Con motivo del 50 aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948-1998), la Organización de las Naciones Unidas proclamó al año 2000 como el “Año Internacional de la cultura de paz” y al periodo 2001-2010 como el “Decenio Internacional de una cultura de paz y no violencia para las y los niños del mundo”.

En el marco anterior, la Unesco publicó el Manifiesto 2000, por una cultura de paz y no violencia, elaborado por un grupo de Premios Nobel de la Paz, con el cual se buscaba promover el compromiso de todas y todos por la paz donde se menciona:

“Reconociendo mi parte de responsabilidad ante el futuro de la humanidad, especialmente para las y los niños de hoy y de mañana, me comprometo en mi vida diaria, en mi familia, mi trabajo, mi comunidad, mi país y mi región a:

  • Respetar la vida y la dignidad de cada persona, sin discriminación ni prejuicios;
  • Practicar la no violencia activa, rechazando la violencia en todas sus formas: física, sexual, sicológica, económica y social, en particular hacia las y los más débiles y vulnerables, como las y los niños y adolescentes.
  • Compartir mi tiempo y mis recursos materiales cultivando la generosidad a fin de terminar con la exclusión, la injusticia y la opresión política y económica;
  • Defender la libertad de expresión y la diversidad cultural, privilegiando siempre la escucha y el diálogo, sin ceder al fanatismo, ni a la maledicencia y al rechazo del prójimo;
  • Promover un consumo responsable y un modo de desarrollo que tenga en cuenta la importancia de todas las formas de vida y el equilibrio de los recursos naturales del planeta;
  • Contribuir al desarrollo de mi comunidad, propiciando la plena participación de las mujeres y el respeto de los principios democráticos, con el fin de crear juntas y juntos nuevas formas de solidaridad.

No sólo es importante promover la cultura de la paz a nivel mundial, como lo hacen la ONU y la Unesco. También es primordial hacerlo en los espacios escolares donde convives diariamente porque siempre hay diferencias que provocan conflictos y éstos, a su vez, pueden desencadenar violencia.

Una forma de mantener la paz y la sana convivencia es el trabajo que se realiza en la organización escolar, la vinculación y estrategias que implementan las autoridades en cada plantel educativo.

Observa al profesor Guillermo Medina Meza y a la profesora Victoria Angélica Hernández Zuleta, quienes dan su opinión acerca de la importancia de la convivencia y las acciones que promueven en su comunidad escolar para fomentar la paz y evitar la violencia entre las y los estudiantes, en los siguientes videos.

  1. FCYE1_B2_SEM23_PG2_VIDEO 1Guillermo.

Revisa del tiempo 0:03 al 0:53.

  1. FCYE1_B2_SEM23_PG2_VIDEO 2 Victoria.

Revisa del tiempo 0:01 al 0:38.

Como te diste cuenta, comprender que la violencia es el origen de la cultura de paz es una oportunidad para tener una convivencia sana.

Has concluido el tema del día de hoy. Se te invita a que investigues más acerca de ello en fuentes diversas y confiables: en tu libro de texto y las páginas oficiales de instituciones gubernamentales e internacionales, como la ONU y la Unesco.

El Reto de Hoy:

Es momento de reflexionar para saber si se logró el propósito de definir la cultura de paz y el rechazo a la violencia como un estilo de vida. Para ello da respuesta a las siguientes preguntas:

  • ¿Qué consideras tú?
  • ¿Comprendiste qué es la violencia y cómo su práctica puede generar más violencia?
  • ¿Ahora eres capaces de rechazar la violencia y definir en qué consiste la cultura de paz?

¡Buen trabajo!

Gracias por tu esfuerzo.

Scroll al inicio